Hacía casi tres años que no salíamos juntas, embarazos complicados, bebés que no dejan dormir por la noche y cansancio hizo que tardásemos tanto en hacer lo que hacíamos todos los fines de semana.
Pero la espera mereció la pena.
Decidimos que recorreríamos los sitios a los que íbamos siendo adolescentes.
Pues bien, así lo hicimos.
Todo estaba exactamente igual (la verdad es que tampoco pasó tanto tiempo).
Todo igual, menos nosotras.
Después de hablar, hablar y hablar fuimos a bailar.
La música era punch, punch, punch, requetepunch, y nosotras un poquito cohibidas dábamos saltitos, hasta que por fin llegó una canción de las nuestras, y ahí ya nos soltamos.
Yo veía a mis amigas y a mi misma y parecíamos Tony Manero en fiebre del sábado noche.
Estábamos rodeadas de Ronaldos de camisetas pegadas al cuerpo y de Karolinas Kurcovas.
Todos guapos y guapas.
... y nosotras...
Y esta salida de ayer me hizo reflexionar... mientras veía a Sandra estirando hacia arriba el brazo, yo bailaba mientras buscaba las salidas de emergencia, y oía a mi madre susurrándome al oído "nena, tú siempre al lado de la salida de emergencia".
Y vi a mis hijos siendo adolescente en esa discoteca, y todo lo que me parecía divertido hasta ese momento, me pareció horrible.
Y pensé... pues no falta tanto...
...y llegué a casa y le dije a mi marido:
_ Júrame que si me muero no vas a dejar salir de marcha a los niños hasta los 45 años.
_ Mmmm (estaba durmiedo).
_ Júramelo.
_ E o furo.
¡ Cuánto me suenan tus temores, ANA !
ResponderEliminarPero , tranquila, despues de un tiempito de sufrir por las noches hasta que vuelven , se supone que te acabas acostumbrando, pero los míos ya tienen 32 y 27 y aún sufro "bucho", buaaaaaaaa.
MUAAAAAAAAAAAAAAAC
Hace unos años, en una situación parecida a la tuya, sentí eactaente lo mismo. Ahora mis amigas me llaman seta, no entieden que no me sienta ya cómoda discotequeando, pensando qué se me perdió, que en pocas horas me tengo que ocupar de tres retoños y el cuerpo ya no aguanta resacas de insomnio juerguil. Gracias por describir tan bien el momento en que algunos (no todos) tomamos realmente conciencia de que inevitablemente hemos pasado una página...
ResponderEliminarLas ganas que tengo yo de desmelenarme tambien una noche, pero lo mismo que tu que mi nena salga a partir de los 45
ResponderEliminarJajaja... es buenísimo ana, no puedo dejar de reir... Y tienes razón, este verano también salí con mis amigas "de marcha" y menuda marcha!!! Estaba horrorizada y espero poder ocultarle esos sitios a mis hijos durante muuuucho tiempo... Qué tal vivir en el campo y ponerles un profesor particular??? No sé, no sé... Gracias por contarnos tu fant´stica noche. Un besito
ResponderEliminarQUE GRAN NOCHE....no??
ResponderEliminartu no le des vueltas a lo de salir de tus hijos(los mios saldran con los tuyos a los 45) y tu sal mas............
mil besitos desde granada
jajaj, pero que graciosa!!
ResponderEliminarEs que todas pensamos lo mismo!!!
Y como lo hacían nuestras madres????
besos
ja,ja,ja, si es que no hay nada como ser madre para que te fastidie un poco menos lo que te hacía la tuya!!
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