Mi amiga Marifé de Triana, vive muy cerca de una tienda donde venden loza, y siempre la lío para entrar cinco minutitos, porque es una tienda preciosa, al final, ella siempre sale con una taza con su plato porque no lo puede evitar, y tengo que oírla porque dice que por mi culpa tiene 100 tazas preciosas cada cual de su padre y de su madre. Eso si muy bonitas.
Que idea tan original! Me encanta como quedan, me lo apunto. Un beso y feliz lunes
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