Por supuesto yo no se lo expliqué, lo hizo su padre que es mucho, pero mucho más natural que yo.
Cuando se lo estaba explicando lo único que le pedí es que utilizase la palabra pilín, no la que trae en el libro (me llamó ridícula).
Terminó la explicación, yo estaba pasando el aspirador e hice como que me importaba un pimiento.
_ Así que ahora estudia las dos primeras preguntas_ le dice su padre.
_ Vale_ contesta ella.
_ ¿Quieres que te ayude yo a estudiar? _le pregunté.
_ Bueno, pero si me sé las dos primeras, planto ¿vale?.
_Bien_ le digo yo.
Después de un rato, cuando ya se lo sabía seguimos cada uno con nuestras cosas.
_ Por cierto papá, tenías tú razón, mamá sacó el tema varita mágica por supuesto que no le hice caso.
_ Pero es verdad , en serio_ le dije yo.
En fin, que mi pequeño tesoro, mi bebé dulce y cándido, mi sol no quiere tener niños nunca, nunca, y como mucho se casa a los cuarenta, ya le dije que a los cuarenta es muy temprano, que lo mejor era a los cincuenta y después ya me voy yo a vivir con ellos.