A media noche el muñeco cobra vida.
El niño está acostado, pero se levanta y, con el pijama y la baa sale a jugar con él.
A los niños les encantará confirmar que al muñeco de nieve le da miedo el fuego, y sólo come comida fría, y que le fascinan las luces y la televisión.
Pero lo máximo es cuando el muñeco comprueba que puede volar y se lleva al niño a un viaje mágico por el cielo.
El paisaje que atraviesan es el territorio natal de Briggs, las tierras bajas de Inglaterra y la ciudad costera de Brighton donde aterrizan en su famoso embarcadero.
Se quedan allí hasta el amanecer cuando el niño se acuesta y comprueba que al levantarse el muñeco se ha derretido.
Ya lo sé, el final es un poco así... pero yo no lo escribí... yo se lo cambiaría... por ejemplo... el niño se lo cuenta a sus padres que le preparan una habitación congelador para que pueda pasar el resto del año, las vacaciones las pasarían en lugar de ir a un camping, en el Polo Norte, con toda la familia... pero en fin así no tendría el éxito que tiene ahora.
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